Colonias escolares, ¿si ó no?

La mayoría de centros educativos planifican una salida de colonias dentro de su calendario escolar como una parte más de la enseñanza.Se trata de salidas que duran un mínimo de dos días para los más pequeños y que se pueden alargar hasta cinco días para los más grandes. En ellas los niños conviven con sus compañeros y realizan multitud de actividades.

Las colonias se realizan en casas rurales adaptadas a este tipo de huéspedes. Suelen estar ubicadas en parajes amplios y están dotadas de todo lo necesario para garantizar la seguridad de nuestros hijos. Muchas de estas casas ya cuentan con monitores especializados, que realizan actividades apropiadas para cada edad. Algunos de los centros son granjas que disponen de animales como gallinas, cerdos, vacas… muy apropiados para realizar actividades con los más pequeños.

En estas salidas nuestros hijos tendrán que seguir una rutina, todo está planificado, el levantarse, el aseo, las comidas, las actividades… a los más pequeños les ayuda porque aprenden a convivir con otros niños y a ser un poco más autónomos.

Antes de tomar la decisión de apuntar o no a nuestro hijo a estas salidas, debemos de tener respuesta a una serie de cuestiones:

  • ¿Dónde se realizan las colonias? ¿De que tipo de alojamiento se trata?
  • ¿Cuántos días dura? ¿Cuál es el horario previsto de salida y de llegada?
  • ¿Cuál es el menú que tomarán esos días? Esta cuestión es muy importante para niños con alguna alergia alimentaria, pues en estos casos es necesario asegurarse que habrá un menú alternativo.
  • ¿Cuántos profesores y monitores estarán al cuidado de nuestros hijos?
  • ¿Qué tipo de actividades tienen programadas?
  • ¿Cuál es el coste de la salida?

Si decidimos que nuestro hijo vaya de colonias deberemos:

  • Asegurarnos que el niño desea ir. No es conveniente obligarlo a realizar esta actividad.
  • Informar al profesor sobre cualquier aspecto que se deba tener en cuenta. Si toma alguna medicamento, el docente deberá conocer la dosis y horarios de las tomas, si sufre de alguna alergia, deberá llevar su medicación, etcétera.

Otra pregunta que muchos padres nos tenemos que responder es ¿seremos capaces de estar esos días sin nuestros niños? Por eso hay que valorar que además de diversión, estar unos días fuera de casa sin la protección de los padres, les puede aportar unos valores muy importantes como son la colaboración, responsabilidad, sociabilidad, independencia…

Sin lugar a dudas es una experiencia única tanto para los padres como para los hijos.

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